Vida de poeta

 

VIDA DE POETA (a mi padre, Diego Medina Martín)

El que a ser dios renuncia por dar vida/
y a sus hijos rescata de la nada,/
el que por cada ardor y llama y cada/
lumbre de sol se amanece suicida./

El que al dar todo se torna homicida/
de alquimias y renglones, y es espada,/
verso en la herida, y alma apagada,/
que presta corazones y arde en vida./

A aquel peregrino que con mapa/
cruzó de itsmo a península certera/
concédale el azar su hegemonía./

El que renuncia a rutas, el que atrapa/
sueños de un alma encendida, espera/
padre, que todo en ti es poesía.